Los idiomas más fáciles y más difíciles de aprender para hispanohablantes

Aprender un nuevo idioma puede ser un desafío con altos y bajos, pero al final ver los resultados es algo muy gratificante. Cabe mencionar que algunos idiomas pueden resultar más accesibles que otros para los hispanohablantes debido a las similitudes lingüísticas y culturales. En este artículo, exploraremos cuáles son los idiomas más fáciles y más difíciles de aprender para aquellos que hablan español como lengua materna.

Factores que facilitan o dificultan el aprendizaje

Diversos factores hacen que un idioma sea más fácil o difícil de aprender. A continuación, te describiré algunos de los factores más importantes y cómo se relacionan con cada idioma del listado:

  • Pronunciación

Algunos idiomas presentan sonidos y entonaciones que pueden ser difíciles de reproducir para los hispanohablantes. Por ejemplo, los diptongos en francés, la pronunciación de las letras «S» y «R» en portugués, y los tonos en chino mandarín pueden representar un desafío considerable.

  • Similitudes gramaticales

Los idiomas con estructuras gramaticales similares al español, como los idiomas romances, suelen ser más fáciles de aprender. Por ejemplo, tanto el español como el italiano tienen conjugaciones verbales similares.

  • Vocabulario compartido

Un gran número de palabras compartidas o similares facilita la comprensión y el aprendizaje. El español y el portugués, por ejemplo, tienen un léxico muy parecido debido a sus raíces latinas comunes.

  • Sistemas de escritura

El uso de alfabetos o sistemas de escritura diferentes puede ser un obstáculo significativo. Por ejemplo, los hispanohablantes están acostumbrados al alfabeto latino, por lo que aprender a leer y escribir en chino (con ideogramas que representan ideas completas), árabe o ruso puede ser más desafiante.

Considerando lo anterior, he calificado cada idioma en un ranking de los idiomas más fáciles y difíciles para nosotros los hispanohablantes:

Idiomas más fáciles de aprender

  1. Portugués (9/10)

El portugués y el español comparten una gran cantidad de vocabulario y estructuras gramaticales, lo que facilita mucho el aprendizaje. Además, la pronunciación es bastante similar, aunque hay algunas diferencias que se pueden superar con la práctica. Esto hace que el portugués sea altamente accesible para los hispanohablantes. Por ejemplo:

  • Español: «¿Dónde está el baño?»
  • Portugués: «Onde está o banheiro?»
  1. Italiano (8/10)

El italiano es otro idioma romance que tiene muchas similitudes en vocabulario y gramática con el español. Asimismo, la pronunciación es relativamente fácil para los hispanohablantes, aunque puede requerir ajuste en algunas reglas específicas. Por ejemplo:

  • Español: «Buenos días»
  • Italiano: «Buongiorno»
  1. Francés (7/10)

El francés, aunque comparte mucho vocabulario con el español, presenta desafíos en pronunciación debido a los diptongos y sonidos nasales. También, la gramática puede ser compleja, pero las similitudes léxicas ayudan a los hispanohablantes a adaptarse más fácilmente. Por estos motivos, el francés es relativamente accesible, pero requiere más esfuerzo en pronunciación. Por ejemplo:

  • Español: «¿Cómo te llamas?»
  • Francés: «Comment tu t’appelles?»

 Idiomas más difíciles de aprender

  1. Chino Mandarín (3/10)

El chino mandarín es notoriamente uno de los idiomas más difíciles para los hispanohablantes debido a su sistema de escritura y su pronunciación tonal, que es completamente ajena a la experiencia lingüística del español. Estos factores combinados hacen que el mandarín sea uno de los idiomas más desafiantes de aprender. Por ejemplo:

  • Español: «Hola»
  • Chino Mandarín: «你好» (Nǐ hǎo)
  1. Árabe (4/10)

El árabe presenta ciertos desafíos con su alfabeto diferente, su estructura gramatical compleja y su pronunciación. Adicionalmente, la existencia de muchas variaciones dialectales puede complicar aún más el aprendizaje para los hispanohablantes. Por ejemplo:

  • Español: «Gracias»
  • Árabe: «شكرا» (Shukran)
  1. Ruso (5/10)

El ruso utiliza el alfabeto cirílico, lo que supone un primer obstáculo. Además, tiene una gramática compleja con declinaciones y una pronunciación que puede ser difícil de dominar para los hispanohablantes. A pesar de estos desafíos, el ruso puede ser más accesible que el chino y el árabe debido a su estructura de palabras más reconocible. Por ejemplo:

  • Español: «Buenos días»
  • Ruso: «Доброе утро» (Dobroye utro)

        Todo esto puedes considerarlo al elegir aprender un nuevo idioma, ya que esto es una decisión personal que claramente puede estar influenciada por muchos factores, incluyendo la facilidad del idioma en relación con tu idioma nativo, el español. Así que, mientras algunos idiomas pueden ser más accesibles, otros presentan desafíos únicos que también pueden hacer el proceso de aprendizaje más interesante y gratificante.

        Si estás considerando aprender un nuevo idioma, evalúa estos factores y elige el que mejor se adapte a tus intereses y objetivos. Recuerda que, con dedicación y los recursos adecuados, cualquier idioma puede ser aprendido con éxito.